Poder sellar una olla es un arma de doble filo en el sentido de que no puedes abrirla a mitad de camino para comprobar la comida. Bueno, técnicamente, puedes abrir la tapa, pero eso despresurizaría la olla y aumentaría el tiempo total de cocción de forma sustancial. Esto significa que cualquier cocción realizada en una olla a presión debe ser programada correctamente para obtener los mejores resultados.
Lo mismo ocurre con las freidoras de aire, las ollas de cocción lenta y otros métodos convencionales de cocción, pero permiten al usuario hacer esos ajustes sobre la marcha con facilidad.
Las ollas a presión son únicas en su forma de cocinar. La acumulación de presión de vapor en el interior de la olla hace que los tiempos de cocción sean más rápidos, hasta un 30%. La tapa de la olla a presión y la unidad principal están cerradas herméticamente y no pueden abrirse hasta que la unidad se haya despresurizado. La tapa suele ser de acero inoxidable y no permite al usuario vigilar el contenido de la olla mientras se cocina.
Entonces, ¿cómo saber cuándo una olla a presión está hecha? Para saber si tu olla a presión está hecha o no, recomiendo seguir las recetas (hay miles disponibles en Internet) y/o los tiempos de cocción proporcionados por el fabricante al principio, y luego hacer ajustes si es necesario. Otras cosas, como el aroma que sale de la olla, pueden revelar hasta dónde ha llegado la comida dentro de la olla.
Al principio, me costaba cocinar en la olla a presión sin una receta o unas directrices claras, porque me pasaba o me quedaba corta la comida. Hoy en día, mis dos herramientas principales son las que he mencionado anteriormente, pero hay aún más formas de hacerlo.
Sigue leyendo para saber cuáles son, y puede que te convenzan más que los métodos que yo he utilizado para controlar el ciclo de cocción de mi olla a presión.
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¿Cómo puedo comprobar si la comida dentro de mi olla a presión está hecha?
Como las ollas a presión se cierran herméticamente y reducen el tiempo de cocción hasta en un 70%, son muy diferentes de muchos otros métodos de cocción. Esto ha dado lugar a una curva de aprendizaje más pronunciada, que creo que merece totalmente la pena escalar porque los beneficios son impresionantes.
Aquí tienes un par de formas de comprobar si la comida dentro de tu olla a presión está hecha.
Abre la tapa: Si cambias el mando de ventilación de sellado a ventilación, la olla a presión liberará la presión. Una vez despresurizada por completo, se puede abrir la tapa y el usuario puede entonces comprobar la comida y si necesita más tiempo o no. Para reanudar la cocción, sella la olla y pon en marcha el aparato. Hacer esto añade un par de minutos más al tiempo total de cocción, ya que la presión debe acumularse de nuevo.
Agita la olla con cuidado: Si mueves la olla, podrás comprobar cuánto líquido queda en la olla, lo que te dará una idea de hasta dónde ha llegado la olla.
Huele el aroma: De vez en cuando suena el silbato de la olla a presión, y cuando lo hace, sale vapor de la olla. Este vapor transporta los aromas que se mantienen dentro de la olla. Cuanto más avanzada esté la comida, más intenso será el olor. Esto puede servir de indicador del grado de cocción de la comida.
Sigue las recetas: Seguir recetas es seguro, y con la increíble cantidad de recetas disponibles en Internet, es también un mar de oportunidades interminable. Empieza siguiendo recetas hasta que le cojas el tranquillo a tu cocina. Ten en cuenta que hay ollas a presión de diferentes tamaños y que requieren diferentes cantidades de líquido para presurizar.
Lee el manual de instrucciones: La mayoría de los manuales de instrucciones vienen con unas pautas para determinados alimentos. A menudo, el manual de instrucciones te dará el tiempo de cocción para 10-15 ingredientes diferentes. Aunque yo prefiero seguir una receta, el manual de instrucciones sigue siendo una gran fuente de información tanto para los principiantes como para los veteranos.
Ten en cuenta la altitud: A mayor altitud, el tiempo de cocción de los alimentos aumenta considerablemente. Hay menos presión atmosférica, lo que contrarresta el efecto de la olla a presión, hasta cierto punto. Las ollas a presión siguen siendo muy eficaces a mayor altitud, pero hay que ajustar las recetas. A 900 metros, el tiempo de cocción de cualquier comida debe aumentarse en un 5%, y a partir de ahí, añadir un 5% por cada 300 metros. Por ejemplo, a 2100 metros el tiempo de cocción debe aumentarse en un 25%.
Escucha los silbidos: Algunas ollas a presión, como la colección Hawkins, silban de forma regular. Estos silbidos pueden utilizarse como medidas. En condiciones perfectas, para preparar una tanda de lentejas hay que ponerlas en remojo durante media hora y luego cocerlas a presión hasta que hayas oído 3 silbidos. Estas ollas requieren ajustes manuales de la temperatura a lo largo del ciclo de cocción y, en general, no son tan cómodas como sus homólogas eléctricas, en mi opinión.
¿Cómo abrir una olla a presión?
Debes tener en cuenta el tiempo que se tarda en liberar la presión y abrir la olla a presión a la hora de programar tus comidas. En primer lugar, la olla tarda entre 5 y 30 minutos en crear presión, dependiendo de varias cosas.
Luego, cuando hayas terminado de cocinar, la olla debe despresurizarse antes de abrir la tapa. Forzar la apertura de la tapa cuando la olla está presurizada puede hacer que la tapa y el contenido de la olla salgan volando por toda la cocina. Eso es algo que definitivamente quieres evitar. Lo más probable es que la comida dentro de la olla esté lo suficientemente caliente como para quemar al usuario, y también el vapor.
En su lugar, la presión dentro de la olla debe liberarse de forma natural, dejando reposar la olla durante 25-30 minutos después de cocinar, o «ventilando» rápidamente la olla.
Cambiar el botón de ventilación de sellado a ventilación abrirá una vía de escape para el vapor atrapado. Recuerda que el vapor caliente saldrá por el orificio una vez que lo hayas abierto, así que ten cuidado con dónde pones las manos para no quemarte.
El método de ventilación o de liberación rápida despresurizará tu olla en no más de 5 minutos.
Ambos métodos son perfectamente válidos, todo depende del tipo de alimentos que cocines y del tiempo de cocción. Lo más probable es que los alimentos que no quieres que se cocinen en exceso deban sacarse de la olla lo antes posible después de cocinarlos, por lo que liberar rápidamente la presión es la opción más adecuada en esa situación.
Cuando cocines carne, puedes beneficiarte de dejarla reposar en la olla durante 30 minutos más, porque la hace más tierna y jugosa, lo que me parece delicioso.
El tiempo de cocción real se reduce en la olla a presión. Pero aunque la olla a presión tarda en acumular presión y luego en liberarla, sigue siendo más rápida que muchos otros métodos de cocción.
Consejos para usar una olla a presión por primera vez
Tu olla a presión soltará vapor, no hay nada malo en ello: Sé que muchos usuarios piensan que algo va mal en su olla cuando notan que suelta vapor al cocinar, ¿no se supone que lo atrapa? Pues bien, la olla debe dejar salir un exceso de vapor para evitar que explote. No puedes atrapar cantidades infinitas de presión en un recipiente pequeño.
Asegúrate de añadir suficiente líquido para evitar que se queme el fondo de la olla: Si la cantidad de líquido que se añade a la olla no es suficiente, los alimentos de la olla acabarán quemándose. Algunos alimentos sueltan líquido al calentarse, otros lo absorben. Es importante que tengas en cuenta estos aspectos cuando utilices la olla a presión. La cantidad mínima de líquido es de alrededor de 1 taza de agua.
Añadir cantidades excesivas de agua reducirá la intensidad del sabor. Intenta equilibrarlo lo mejor posible.
Cuando cocines ingredientes que producen espuma, no llenes demasiado la olla: Cosas como las alubias, el arroz y las lentejas generarán espuma durante la cocción. Si la olla se llena en exceso, la espuma se abrirá paso hasta el orificio de salida y acabará obstruyéndolo. Esto impide que el exceso de presión salga de la olla, lo que puede ser peligroso. Recomiendo llenar la olla hasta la mitad cuando cocines ingredientes que se expanden o generan espuma.
Puedes comprobar la comida a mitad de camino
Por último, me gustaría añadir que no hay nada malo en abrir la olla (una vez que se ha despresurizado) para añadir más agua o comprobar la comida. Sí, es más difícil hacer ajustes cuando se cocina en una olla a presión, pero no hay nada que te impida hacerlo.
El único inconveniente es que se necesita más tiempo. Pero ese es tu tiempo, no el mío ni el de nadie. Si te sientes más seguro abriendo la olla para comprobar la comida, adelante.
Cuando reanudes la cocción, la olla acumulará presión mucho más rápido porque los líquidos del interior de la olla ya están lo suficientemente calientes como para producir presión de vapor una vez que la tapa esté sellada.